Nada alivia las molestias de una mudanza como una fianza 100% reembolsada.
Desde que decides mudarte hasta que ves la fianza de tu alquiler depositada nuevamente en tu cuenta vives una incertidumbre. Y nerviosos al respecto están todos, tanto inquilinos como propietarios.
Recuerda que la fianza esencialmente es tu dinero por lo que, si has obrado correctamente y tomado tus recaudos, no debes sentir desasosiego a la hora de mudarte.
La devolución de la fianza no es un tema que guarde tanto misterio pero seguro que conoces a alguien, el amigo de un amigo, que tuvo que dar batalla para recuperar su dinero o aquel otro que, siendo propietario, no tuvo más opción que devolverla y poner dinero de su bolsillo para dejar el piso en condiciones de nuevo.
Lo mejor para evitar malentendidos, poco frecuentes pero que ocurren, es conocer nuestros derechos, nuestras obligaciones y recibir un par de consejos de expertos que aseguren que tu fianza vuelva al lugar donde pertenece: tu cartera.
Claves de la fianza
- Cuando coges un piso en alquiler estás obligado por la Ley de Arrendamientos Urbanos a dar un mes de alquiler al propietario en concepto de fianza (en algunos casos puede ser un mes de fianza y un mes de garantía adicional). La fianza será de dos meses en el caso de arrendamiento para uso distinto del de vivienda, o para alquileres de uso temporal.
- Durante los 3 primeros años de duración del contrato, la fianza no está sujeta a actualización. Pero cada vez que el arrendamiento se prorrogue, el arrendador puede exigir que la fianza sea incrementada, o el arrendatario que disminuya, hasta hacerse igual a una o dos mensualidades de la renta vigente.
- En el momento de dejar el piso el propietario debe devolver la fianza al inquilino previo descontar deudas que tenga pendientes, que pueden ser:
- Alquileres pendientes
- Indemnización por disolución de contrato antes de tiempo, siempre que ésta esté incluida en el contrato en la cláusula de desistimiento e indemnización. Normalmente, a partir de los 6 meses se puede dejar la propiedad con un preaviso de 30 días sin pagar indemnización.
- Deudas de suministros
- Desperfectos en la vivienda. El inquilino está obligado a reparar todo aquel desperfecto que surja del uso diario y ordinario de la vivienda. Las reparaciones que aseguran la habitabilidad del lugar están a cargo del propietario.
Consejos para recuperar la fianza
Es obvio que el primer consejo que te damos es que no acumules deuda de ningún tipo, ni en los alquileres ni en el pago de suministros.
Respecto al estado del piso al momento de la entrega éste debe estar sano y limpio. Lo de la limpieza es relativo y lo que se aconseja, aunque no siempre se lleva a cabo, es que el contrato de alquiler incluya fotos de la vivienda tal y como se entrega el primer día para poder comparar con el estado de devolución.
Aunque este punto no siempre se cumpla todos sabemos, propietarios, inquilinos e inmobiliarias cómo se entregó y cómo debe devolverse la vivienda en términos de limpieza.
El inquilino también ha de hacerse cargo de la pintura si ha cambiado el color de las paredes sin autorización o si ha dañado las paredes al colocar muebles, estanterías, etc.
Más recomendaciones:
- Planea bien la mudanza. El día en que te llevas tus cosas es un día de jaleo en el que el piso puede sufrir daños. Prevé arañazos en los pisos de madera colocando un paño debajo cuando muevas muebles y cubre también todas las esquinas que puedan dañar paredes en un giro inesperado.
- Además de aspirar y quitar el polvo de forma estándar, realiza una limpieza profunda que deje impresionado al propietario. Repasa detrás y debajo de los electrodomésticos. No olvides los interruptores de luz y marcos de puertas ¡No dejes ni huella!
- Si compartes piso, múdate a la vez que tus compañeros. Sí, sí, son tus amigos y confías en ellos pero mejor no llevarte sorpresas por imprevistos que sucedieron mientras tú ya estabas acomodando tus muebles en tu nuevo hogar.
- Y ya en el colmo de la precisión invita a algunos amigos de confianza, los más tiquismiquis, a hacer una inspección. Puede que te sorprenda la cantidad de cosas que, en el fragor de la mudanza, habías pasado por alto.
Si al cabo de un mes de la entrega de llaves, donde se firma el documento de fin de alquiler que especifica la devolución de la fianza, no has recibido el dinero y no hay causa justificada para esta demora estás en tu derecho de reclamar la fianza y sus intereses legales.
Como te dijimos antes, y en base a nuestra experiencia, rara vez se llega a estos extremos.
En esta etapa también debemos estar presentes las inmobiliarias y es parte del servicio distintivo que brindamos en Walter Haus: orientación, consejo e intermediación para que todas las partes, propietario e inquilino, se sientan satisfechas y tranquilas y que el apretón de manos del primer día sea tan amable como el del último.