Siempre atentos a los factores internacionales que pueden influir en el mercado inmobiliario global, y uno de los más recientes es el aumento de aranceles en Estados Unidos impulsado por el presidente Donald Trump. Esta política comercial ha despertado inquietudes en el sector constructor, ya que se estima que el coste de levantar una vivienda en suelo estadounidense podría incrementarse en más de 9.000 dólares. Este aumento, impulsado por el encarecimiento de los materiales importados, podría repercutir directamente en el precio final de venta, lo que representa un desafío tanto para constructores como para compradores.
Subida arancelaria y su efecto en los costes de construcción
La medida, que eleva los aranceles efectivos a cerca del 26% desde el 2,3% inicial, representa un cambio radical en la estructura de importaciones. Aproximadamente un 10% de los materiales utilizados en la construcción residencial provienen del extranjero, y buena parte de ellos están ahora sujetos a estos nuevos gravámenes. Según la Asociación Nacional de Constructores de Viviendas (NAHB), los desarrolladores han reportado un aumento medio de 9.200 dólares por vivienda, lo que afecta significativamente su capacidad de ofrecer precios competitivos sin sacrificar márgenes. Esta presión en costes también podría desacelerar la actividad constructora, agravando el ya existente déficit de viviendas en el país norteamericano.
El coste recae sobre el comprador final
Desde nuestra experiencia en Walter Haus, sabemos que cualquier variación en los costes estructurales de una vivienda termina afectando al comprador final. En este caso, los nuevos aranceles podrían dificultar aún más el acceso a la vivienda para muchos ciudadanos estadounidenses, especialmente en un contexto donde los precios medios ya rondan los 414.500 dólares. La presión financiera se suma a los altos tipos de interés, generando un entorno poco favorable para nuevos compradores. Además, los materiales esenciales como el yeso, proveniente en su mayoría de México, y otros componentes básicos, están sujetos a estos impuestos, lo que impacta especialmente en las viviendas de precio más asequible.
Repercusiones en la política monetaria y los intereses hipotecarios
La inflación derivada del incremento en costes de importación también tiene un efecto colateral preocupante: su potencial influencia en los tipos de interés hipotecarios. La Reserva Federal, en su esfuerzo por contener la inflación, podría verse obligada a mantener políticas monetarias más restrictivas. Actualmente, los intereses hipotecarios a 30 años superan el 6,6 %, un nivel que desalienta a potenciales compradores. Aunque Trump ha declarado su intención de reducir estos tipos, la realidad es que las políticas comerciales podrían estar generando el efecto contrario, comprometiendo la accesibilidad al crédito para miles de familias.
Reflexión desde Walter Haus: la importancia de un mercado global equilibrado
En Walter Haus, comprendemos que el mercado inmobiliario es un ecosistema interconectado, donde decisiones tomadas a nivel global pueden tener repercusiones incluso en regiones aparentemente ajenas. La situación en Estados Unidos nos recuerda la relevancia de mantener un comercio internacional equilibrado, que permita el acceso a materiales de calidad a precios razonables. Como agencia especializada en inmuebles de alto standing, valoramos la estabilidad en todos los factores que componen una operación inmobiliaria, desde el diseño y la construcción hasta la financiación. Seguiremos atentos a la evolución de estos cambios para seguir ofreciendo a nuestros clientes un servicio informado, riguroso y adaptado a los tiempos.